"Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá."
Está escrito, es Palabra de Dios, entonces, ¡ no lo dudes !
El que pide, recibe. El que no pide ---------------------> no podrá recibir.
Pero, si pedimos lo que va contra lo establecido en la Biblia, no lo alcanzaremos.
Nunca debemos pedirle a Dios lo que sabemos que le desagrada.
No podemos pedir lo que sea malo ante Sus ojos, no podemos pedir que Él nos ayude a hacer lo malo. No podemos pretender que Dios esté de nuestra parte si lo que deseamos hacer nos ocasionará un daño a nosotros o a otra persona.
No es sabio -por ejemplo- que un hombre que piensa robar un Banco le ore a Dios pidiéndole auxilio para robar. Dios no se contradice, Dios es Santo, y es justo.
Es muy importante conocer la Palabra de Dios, es muy importante que conozcamos Su voluntad, y ella está contenida en la Biblia.
Si leemos la Biblia sabremos lo que para Dios está bien y lo que no lo está. Si leemos la Biblia sabremos mejor cómo orar.
Vayamos a otro ejemplo, si en la Biblia en 3era Juan 2 dice: "Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma" ¿te parece que sería malo pedirle a Dios que te sanase? No, ¿verdad? Si pido en oración que Dios me sane, estoy pidiendo dentro de Su voluntad. Si Dios me quiere sanar yo me uno a Él, y le diré: "Sáname, Señor."
Pero cuando no se la voluntad de Dios -porque la ignoro o porque en la Biblia no hay una afirmación al respecto- le digo "que se haga Tú voluntad mi Dios. En el nombre de Jesús."
Si pedimos lo que Dios ha preparado para nosotros ¡lo recibiremos!
Ahora pedile y recibirás lo que Dios tiene para ti. ¡Vamos! ¡vamos! ¡pon tu fe en acción!
El que no pide no recibe.
Buscá a Dios y lo encontrarás, porque el que busca, encuentra.
Dios es bueno.
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