domingo, 17 de noviembre de 2013

Cuando oramos -estando con el corazón afligido- con Fe en Dios, sin dudas, obtendremos Su respuesta.

                                           Salmos 138:3.
"Cuando te llamé, me respondiste;
 me infundiste ánimo y renovaste mis fuerzas". Biblia : Nueva Versión Internacional (NVI).

"En cuanto oro, tú me respondes;  me alientas al darme fuerza". Biblia : Nueva Traducción Viviente (NTV).

"Te llamé y me respondiste;me diste nuevas fuerzas". Biblia : Traducción en lenguaje actual (TLA).

 "En el día que invoqué, me respondiste;
me hiciste valiente con fortaleza en mi alma". Biblia : La Biblia de las Américas (LBLA).

"Cuando te llamé, me respondiste,
y aumentaste mis fuerzas". Biblia : Dios Habla Hoy (DHH).
 
Éste es un Salmo de acción de gracias, una alabanza a Dios. ¡Cuántas veces lo he leído en la congregación o en mi casa para alabar al Dios Altísimo por Su obrar en mi vida, siempre fiel y amoroso!
Meditá en este versículo, sería maravilloso que te tomaras un tiempo y leyeras todo el Salmo 138, que recordaras esos momentos en que le pediste Su ayuda y Él te respondió con Su gran sabiduría e inigualable poder. Sería muy bueno que te dieras tiempo para pensar y agradecerle por lo que hace en tu vida a cada instante, que pudieras agradecerle a Dios por Su misericordia, por Su amor, Su poder, Su bondad, etc. 
Quedate meditando, meditá en cada palabrita que leas. Pensá en lo maravilloso que es conocerlo y saber que Él es real, en lo precioso que es contar con Su amor y verdad. Dios te bendiga.
A Él sea la gloria y la honra ¡por los siglos de los siglos!
 

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