Por la gran misericordia y fidelidad del Altísimo, ésto se hace realidad en la vida de todos aquellos que lo aman, en la vida de quienes desean ser hacedores de Su Palabra y que lo adoran en espíritu y verdad.
Por favor, meditá este versículo bíblico.
Si sos Cristiano desde hace ya un buen tiempo, recordá cuántas veces algunas cosas que ocurrieron en tu vida te parecieron malas y en cambio un tiempo después pudiste notar que ¡ hasta ellas ! cooperaron para tu bien.
Agradecéselo -entonces- a Dios.
La gloria a Él le pertenece, ... ¡ siempre !
Gracias Padre Eterno por todas Tus maravillas.
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