Lo que dice en el vidrio de este auto es una CONSTANTE. Todos lo resumen así.

Estabamos con mi familia una noche tomando un helado -hace pocos días atrás- cuando este auto estacionó delante del nuestro, entonces, leí: "Jesucristo cambió la historia de mi vida". 

¡ Qué maravilla ! y algunos se cuestionan si Dios hace milagros en la actualidad o no.

Para mí uno de los mayores milagros que Dios hace es éste : transformar completamente a un ser humano, aunque algunos perciben solamente el cambio cuando la persona en cuestión es alguien que la sociedad piensa que ya no tiene 'solución, Dios cambia a innumeras personas la historia de su vida. En algunos casos el cambio se va observando de a poco, con el pasar de los días, en otros la persona cambia tan significativamente que todos lo notan enseguida. Pero es indiscutible Él sí puede cambiar y transformar a un hombre, por completo, lo que para algunos es un imposible.

Lo fantástico fue que en esta oportunidad pude hablar con el propietario de este automovil y me contó brevemente cómo su vida fue transformada, y porqué se decidió por colocar este texto en su vehículo y no otro. Además me expresó que también en cuatro vehículos anteriores adhirió -en el vidrio trasero de los mismos- textos vinculados a su fe. 

Pena que no pudimos dialogar mucho y me quedé con ganas de saber qué se leía en esos otros vehículos. 

¿ Te puedo contar algo ? Él también cambió mi historia, y lo hace todos los días con cada individuo que tiene un encuentro real con Él. Cuando Jesús surgió en nuestro planeta hizo lo mismo, por lo que nos referimos a la historia universal diciendo "antes de Cristo" y "después de Cristo".

Así es Jesús, cuando llega todo se transforma. Cuando le abrimos nuestro corazón ¡ lo cambia todo ! en nuestro ser.

Y si querés que cambie tu historia podrás leer en Etiquetas del Blog donde dice 'ORACIÓN para aceptar a Jesús ...' simplemente el requiere tu sinceridad, que lo hagas de corazón.

Glorias a Dios, a quien desea cambiar nuestras vidas porque anhela para todos -sencillamente- lo mejor.

Entonces, en mi hubo un antes y un después de Cristo también ¡ Cómo me gusta recordarlo ! Bueno, te deseo lo mejor. Que Dios te bendiga.